Cuidar la salud mental de todos los miembros de nuestra familia es fundamental, para esto existen algunas estrategias que te ayudarán a mantener una relación sana y de bienestar con tu mente y cuerpo:
Planeación:
- Actividad 1: Dominio / Agrado: distrae la atención en actividades que sean agradables para alejar preocupaciones.
– Asigna espacios con cada miembro del hogar para motivar la realización diaria de actividades donde sientan que son útiles y que además disfrutan, por ejemplo: cocinar, dibujar, pintar, entre otras. - Estableciendo rutinas: ordena tu mente para cumplir con las actividades que cada día se requieren, sintiendo que el tiempo nos rinde más.
– Importante continuar la realización de rutinas que permitan el cuidado del sueño, la ingesta de alimentos a una misma hora e implementar un cartel con horarios para compartir juegos de mesa o actividades en familia. - Premiando compromisos: sentir que recibimos una recompensa inmediata por algo que hicimos bien, esto para motivarnos a seguir haciendo las tareas diarias.
– Al iniciar el día escribir las metas que se quieren alcanzar durante el mismo para más adelante premiarse con algo agradable si se lograron.
Buscando ayuda:
- Delegando responsabilidades: permite tener claridad desde un principio sobre las actividades que deben hacerse en una casa, además, que no se sobrecarguen unos miembros más que otros con la limpieza o el orden.
– Hacer un cartel que tenga tareas del hogar con las que todos estén de acuerdo, por ejemplo: decidir los días y los horarios que cada persona se comprometerá a organizar cierta parte de la casa. - Comunicando sueños: mantener la esperanza en medio de la angustia que puede generar este momento.
– Emplear un espacio del día para contarnos los proyectos que queremos realizar cuando salgamos del confinamiento. - Generar diálogos: hacer saber a cada persona del hogar lo importante que es para nosotros, enfocarnos en aspectos que sean positivos para que estos se sigan repitiendo.
– Buscar una cajita en donde se coloque dentro papelitos pequeños con aspectos positivos por escrito de cada miembro de la familia.
Expresión emocional:
- Relajación progresiva: esto permite generar más conciencia de nuestro cuerpo, reacciones emocionales y control de impulsos mientras nos calmamos por todo lo sucedido en el día.
– Antes de acostarnos y con los ojos cerrados es posible preparar el cuerpo para descansar, presta atención a la respiración para después tensionar y soltar cada parte del cuerpo desde abajo hacia arriba. - Semáforo emocional: lo puedes usar si estás frente a cualquier situación incómoda, desacuerdo con alguien o conflicto. -Dibujar un semáforo con colores rojo (me detengo ante la situación), amarillo (me
alejo hacia otro lugar para pensar, calmarme y tomar decisiones) y verde (regreso y con mayor
conciencia de la situación, intento solucionarla) en un espacio del hogar para cuando sintamos cualquier emoción que pudiera ser desagradable como miedo, rabia o tristeza.
Reinterpretación positiva:
- Compartir preocupaciones: es importante cuestionarse sobre qué aconsejaríamos a un miembro de la familia o amigo si tuviera también esa misma preocupación, si bien no es posible solucionarlas completamente el hecho de compartirlas hace que pensemos en que alguien más nos puede escuchar.
– Escribir cada uno las preocupaciones o cosas que hacen perder la calma para después compartir estas entre los demás y encontrar aspectos en común. - Buscando evidencias: importante cuestionarnos sobre lo que estamos pensando porque de esto dependen nuestras emociones, recordemos además cómo hemos afrontado antes situaciones de crisis que puedan ayudarnos en este momento.
– Cuando escribamos las preocupaciones es importante que nos preguntemos si eso que tememos realmente pudiera ocurrir.